Antiguo hospital-asilo fundado en 1550 por el sacerdote cordobés Hernando de Dios para albergar a trece ancianos pobres y enfermos. El número de asilados pretendía tener una simbología evangélica. Posteriormente la fundación revertió en la Corona. El edificio primitivo subsistió hasta 1675, en que el arquitecto Juan Tejedor Lozano dio nuevos planos para la iglesia pero ignoramos si se efectuaron puesto que en 1732 Matías Machuca se comprometió a construir la fachada y el interior del templo que presenta uniformidad absoluta y no cabe pensar en acomodamiento a planes anteriores.
Puede decirse que lo más original de la construcción es su fachada, de perfil movidisimo y cuyo diseño en alzado se aparta también de los modelos convencionales vallisoletanos, acusando una inspiración probablemente extraña a Machuca. La iglesia, de cruz latina, se cubre con bóveda de cañón y cúpula decorada con suntuosas yeserías de perfil rococó, que recientemente sufrieron recortes. Su retablo mayor, barroco, dorado en 1745 tiene una composición y decorado ajeno igualmente a lo vallisoletano. En el crucero se conserva una interesante escultura de Ecce-Homo, del primer tercio del siglo XVII, obra de Francisco Alonso de los Ríos. Son también interesantes, aunque no finos, los medallones que con historias de la vida de San Juan Bautista y envueltos en elegantes marcos rococó realizó Claudio Cortigo y se colocaron a lo largo de la nave del templo.
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