Buscador

Búsqueda personalizada

jueves, 29 de noviembre de 2012

¿Es realmente hipertenso?

Para un diagnóstico de hipertensión arterial, el médico o la enfermera medirán dos veces, con un intervalo de unos minutos entre ambas, la presión arterial en tres ocasiones separadas varios dias entre sí. Si la media de ambas tomas en cada una de esas tres ocasiones iguala o supera los 140 y los 90 mm Hg, se diagnostica hipertensión arterial. Es suficiente con que esté elevada una de las dos cifras de presión arterial, la sistólica o la diastólica.

Algunas personas presentan cifras elevadas de presión arterial sólo cuando se la mide el médico o la enfermera, es la llamada hipertensión "de bata blanca". Cuando se sospecha este fenómeno, se recurre a las mediciones efectuadas en casa por el paciente (AMPA: Automedición de la Presión Arterial) o bien a una grabación continua de la tensión durante 24 horas (MAPA: Monitorización Ambulatoria de la Presión Arterial).

Puede ocurrir que sea el médico o el oftalmólogo el que, al observar el estado de los vasos sanguíneos de la retina, descubra que alguien padece desde hace tiempo hipertensión arterial. La hipertensión arterial mantenida a lo largo del tiempo deteriora las arterias de todo el organismo, pero la retina es el único lugar donde éstas pueden visualizarse directamente, mediante la exploración conocida como "fondo de ojo", que consiste en la observación de la retina desde el exterior con ayuda de un instrumento denominado oftalmoscopio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario